martes, 5 de septiembre de 2017

Partidos Políticos, Cambio a Movimientos Ciudadanos

Cuestionados los dirigentes políticos por abstraerse de sus partidos políticos y aspirar vía recolección de firmas para la configuración de movimientos significativos de ciudadanos. La herramienta es legal, existe, y la democracia lo permite.


Vuelven y juegan los líderes políticos en Colombia, a aspirar a los cargos de elección popular por la vía de los movimientos significativos de ciudadanos, o el denominado camino de las firmas, saliendose de los tradicionales partidos políticos por donde han obtenido sus dignidades políticas. el fenómeno no es propio, también sucede en otras latitudes, Macron en francia, el mismo Sarkozy, quienes aspiraron por formaciones políticas a su medida, dejando atrás los partidos tradicionales. 

El sistema democrático-he insistido en varias oportunidades se funda bajo la premisa elemental de la libertad de elegir y de ser elegido, por lo tanto aspirar por otro mecanismo por fuera de los partidos políticos no es problemático a primera vista. El primer problema que salta para el mecanismo que consagra la ley, es que es la válvula de escape de aquellos que sometido a las reglas de partido no alcanzan a ser avalados para participar en los concursos electorales. Por ejemplo elecciones primarias o convenciones de partidos.

El segundo problema, es cuando el partido ha perdido legitimidad y reconocimiento político, ya que siempre se presenta la disyuntiva entre quienes quieren conservar la divisa para sostener la dignidad en proceso electoral reeleccionario. Y aquellos que quieren desprenderse de la divisa que les restaría frente a la opinión pública.

El tercer problema, es frente a aquellos que el sistema de partidos rechaza de plano y no permite que participen de sus procesos internos, aun cuando estas personas hayan simpatizado y hasta militado en el respectivo partido.

El cuarto los militantes tradicionales, que enfrentan las barreras de los lideres tradicionales que no permiten incluso bajo esquemas democráticos internos que estos "lideres" puedan aspirar a representar a sus grupos sociales y al partido en los escenarios públicos.

En Colombia se ha presentado el debate que desde un análisis simple detallaría que no es problemático que los lideres sean tradicionales o no, aspiren por movimientos significativos de ciudadanos, lo que no puede admitirse, es que por esta vía evadan los resultados o determinaciones que por regla democrática interna de sus partidos tomen sus conformaciones políticas. Ahora si es una decisión previa a los certámenes electorales, la guía ética personal de cada líder debe orientar el proceso de retiro y de aspiración por otras vías.

Lo que no puede permitirse es que por esta vía se diluyan otras normas y se vulnere desde lo ético el sistema, pero no se puede fustigar a quien pretenda aspirar por este medio, ya que precisamente el sistema democrático lo permite.

Ahora bien, soy defensor de la institucionalización de los partidos políticos, con reglas claras y democracia interna que permita el fortalecimiento interno, y con cuerpos colegiados de elección popular no reelegibles, que permitan procesos tales que los partidos tengan que innovar socialmente y tengan que renovar sus liderazgos de cara a la ciudadanía. En este escenario la polvareda política de los últimos días tal vez nunca se hubiese presentado.

La última palabra la tendrá la ciudadanía, escoger quién dirija el destino de la sociedad, conforme el análisis que cada quién haga de los múltiples candidatos en contienda, haciendo haciendo los respectivos filtros, en 2018 veremos los resultados.







No hay comentarios:

Publicar un comentario

CONSTRUYENDO IMAGINARIOS POLÍTICOS, Encuestas y estrategias de campaña política.

Imaginarios que no corresponden con el ideal de sociedad y de Estado, que anhela el electorado, tal vez una campaña desenfocada, aupada por...